“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

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19/5/17

John Berger: la mirada, el exilio, la diferencia. La mirada intersubjetiva

John Berger ✆ Shirley Nette Williams
J.M. Romero Barea

En noviembre de 1619 el filósofo francés René Descartes se retiró a fin de reflexionar sobre los fundamentos del conocimiento de nosotros mismos y del mundo. Desde la reflexión que produce la certeza incruenta del cogito sostuvo: “Pienso, luego existo”. Años antes, en 1571, el pensador Michel de Montaigne, aquejado cada vez más de melancolía, se había retirado a la torre de la biblioteca en su finca en el Périgord, donde comenzó a escribir sus Ensayos. Tenía 38 años. Desde las ventanas se podían ver sus fincas y el filósofo podía comprobar así si sus hombres estaban o no eludiendo su trabajo. Inscritas en las paredes y las vigas de su cámara en la torre, unas 60 máximas en griego y latín.

Al igual que Descartes y Montaigne, el crítico de arte, escritor, pintor y poeta, John Berger (Hackney, Londres, 5 de noviembre de 1926 – París, 2 de enero de 2017) ha influido de forma decisiva en la historia universal de las ideas. Uno de los intelectuales británicos más influyentes de los últimos 50 años, su obra ha conformado el pensamiento de al menos dos generaciones de artistas y estudiantes. Desde una fecha tan lejana como 1958, cuando escribió su primera novela, Un pintor de nuestro tiempo, sus libros tratan del exilio y la diferencia, que, desde entonces, se han convertido en cuestiones políticas y sociales de primer orden.

18/5/17

Abril 1917. Y entonces llegó Lenin

Lenin ✆ Arkady Alexandrovich Rylov
"¡Tomad en vuestras manos vuestro propio destino!" (Octavilla repartida en Leipzig en abril de 1917) 

Miguel Salas

El mes de abril se inició en Petrogrado (*) con una protesta de 40.000 personas que exigen igualdad de derechos para las mujeres. Si en febrero ellas habían encendido la mecha de la revolución, no se iban a quedar sin derechos. El gobierno provisional no había acordado nada al respecto, lo dejaba para un futuro indeterminado. No se empieza una revolución para ir aplazando derechos, hay que conquistarlos y ejercerlos. Las mujeres ocuparon el centro de la ciudad y con grandes pancartas exigiendo “Derecho de voto”, “Si una mujer es esclava, no hay libertad”, “¡Viva la igualdad para las mujeres!”, se presentaron ante la residencia del gobierno y allí permanecieron hasta que lograron el compromiso de legalizar el derecho de voto para las mujeres. Al gobierno no le quedó otro remedio. ¡Es lo que tiene un proceso revolucionario! En la primavera de 1917, las mujeres rusas conquistaron un derecho que no tenía ningún otro país europeo. Dos días después, el 3 de abril, según el viejo calendario ruso; el 16 de abril, según el nuestro, Lenin llegará a Rusia y dará un vuelco a los contenidos políticos de la revolución.

11/4/17

Inmigrantes y refugiados en la época de la geoeconomía política

Gonzalo Díaz Letelier
El economista egipcio Samir Amin, en su libro de 1973 «El capitalismo periférico»,[1] advertía que la “globalización” –moderna expansión o mundialización del capitalismo– implica, en el ámbito de las relaciones sociales, políticas y económicas internacionales, una lógica de producción de desigualdad entre las partes (centrales, semiperiféricas y periféricas) integrantes del sistema-mundo.[2] El sociólogo e historiador estadounidense Immanuel Wallerstein, por su parte, propone una matriz de análisis historiográfica de la transformación de los sistemas sociales político-económicos que va de los mini-sistemas hasta los sistemas-mundo. De acuerdo a esta matriz tenemos primero los mini-sistemas (únicos sistemas hasta el 8000 a.C.) –cuya definición antropológica se ha hecho en términos de “bandas” y “tribus”–, que implican en cada caso una sola estructura política, una economía con una división del trabajo a pequeña escala y una sola cultura; y luego tenemos dos tipos de sistemas-mundo (desde el 8000 a.C. hasta hoy), “imperios-mundo” y “economías-mundo”, que respectivamente implican mundialización política y mundialización económica. El “imperio-mundo”, bajo una estructura política y una estructura económica, integra múltiples culturas y es un sistema donde la economía está dominada e integrada por una sola clase política; la “economía-mundo”, bajo una estructura económica, integra múltiples estructuras políticas y múltiples culturas, es un sistema donde las clases políticas están integradas dentro de una sola economía.[3]

13/3/17

Juan Rulfo: 100 años de un precursor

A pesar de haber publicado solo tres libros, Juan Rulfo es uno de los escritores más importantes de las letras hispanoamericanas. Ejerció una influencia innegable en García Márquez
Juan Rulfo y sus libros ✆  Foto: Rogelio Cuellar

Gabriel García Márquez solía contar que cuando leyó Pedro Páramo, la primera novela completa del mexicano Juan Rulfo, sufrió una conmoción que solo había vivido con La metamorfosis, de Franz Kafka. Llevaba pocos meses en México y aunque ya había escrito cinco novelas (algunas de ellas aún eran inéditas) se sentía atascado en su oficio. “¡Lea esa vaina, carajo, para que aprenda!”, le había dicho su amigo el escritor Álvaro Mutis, quien le regaló el libro.

Aquella noche no pude dormir mientras no terminé la segunda lectura –escribió Gabo en 1986 en la revista Araucaria de Chile–. AI día siguiente leí ‘El llano en llamas’, y el asombro permaneció intacto. El resto de aquel año no pude leer a ningún otro autor, porque todos me parecían menores”. Gracias a ese encuentro afortunado, el colombiano encontró el tono para seguir contando historias y años más tarde escribió sus obras maestras.

12/3/17

El eterno debate en torno a György Lukács

György Lukács
El pasado 25 de enero, el ayuntamiento de Budapest decidió retirar la estatura de Georg Lukács de un parque del distrito 13 de la ciudad. El filósofo G. M. Tamás comenta el significado de esta decisión

Gáspár Miklós Tamás

Antes de 1914, las obras tempranas de Lukács fueron recibidas con gran antipatía por el mundillo literario húngaro; las consideraban “demasiado alemanas”, es decir, excesivamente filosóficas, no suficientemente impresionistas y positivistas. Esto no fue más que el comienzo, por supuesto; a partir de entonces, Lukács sería atacado sin cesar desde la derecha, durante toda su vida. Lukács tampoco recibió una acogida mucho mejor en círculos de izquierda. Cuando se publicó su libro más importante, Historia y conciencia de clase (1923), fue atacado con fiereza tanto por la Segunda como por la Tercera Internacional. El libro no volvió a publicarse hasta la década de 1960. A Lukács le dieron un ultimátum: si quería seguir siendo miembro del Partido, tenía que repudiar el libro y someterse a autocrítica, que es lo que finalmente hizo.

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En la Unión Soviética fue duramente criticado en la década de 1930. Poco después de trasladarse de Viena a Moscú, Lukács fue deportado a Tashkent y reducido al silencio. Sin embargo, en 1945 el Partido lo necesitaba –o mejor dicho, su fama– en Hungría. Aceptó volver allí a regañadientes; Alemania Oriental también era una posibilidad. Una vez establecida y consolidada la dictadura en Hungría en 1947-1948, el “debate en torno a Lukács” se relanzó con toda crudeza: lo tacharon de “desviacionista”, de “burgués”, dijeron que era un hombre que no estimaba el “realismo socialista” soviético (dicha sea la verdad: era efectivamente todo eso). De nuevo lo condenaron al silencio, le prohibieron enseñar o publicar en húngaro, aunque parte de su obra pudo cruzar la frontera clandestinamente para ser publicada en Alemania Occidental.

11/3/17

Heidegger era nazi. ¿Lo es su filosofía?

Martin Heidegger ✆ Herbert Bayer
La publicación de los cuadernos íntimos del pensador alemán ha desatado el debate sobre si su antisemitismo contaminó o no toda su filosofía

Luis Fernando Moreno Claros 

El mundo académico de la filosofía tardó tiempo en asimilar que uno de los grandes filósofos del siglo XX, el alemán Martin Heidegger (1889-1976) —autor del rompedor Ser y tiempo (1927)—, simpatizó con el nazismo y aclamó a Hitler. Sólo fue un “error pasajero”, dijeron al principio, ya que el propio filósofo así lo dejó dicho en su célebre entrevista para Der Spiegel. Sus admiradores se tragaron el hueso: peccata minuta si fue nazi circunstancial y a medias; además, él mismo escribió: “Hay grandeza en el errar” y “el extravío es el regalo oculto de la verdad”.

Otro delicado asunto ha salido a la luz con la publicación en Alemania desde 2013 de las sucesivas entregas de los copiosos Cuadernos negros: Heidegger, además de nazi, también fue antisemita. Así parecen mostrarlo algunas anotaciones (pocas, pero relevantes) que salpican aquí y allá los pensamientos misceláneos de estos Cuadernos, y así lo ven estudiosos como Peter Trawny, Donatella di Cesare y Nicolás González Varela en sus interpretaciones. Es menester añadir que, en efecto, a Heidegger hay que “interpretarlo” sin descanso, pues la claridad de estilo no se contó entre sus cortesías (si es que tuvo alguna); escribía en una jerga particular, críptica y oscura hasta para los iniciados.

3/3/17

Giorgio Agamben: el espíritu que vive

Giorgio Agamben ✆ Sébastien Plassard
José de María Romero Barea

El filósofo del siglo XXI ha de ser un orador dotado: tumultuoso, contundente, directo y paradójico. Debe escribir como habla. Giorgio Agamben (Roma, 1942) es un pensador así: su familiaridad con los clásicos filosóficos nos deja a veces con dificultades para respirar, pero ofrece a cambio un montón de líneas de actuación en forma de anécdotas, chistes y referencias inagotables a la cultura popular. Siempre logra redimirse a sí mismo, a ojos de sus admiradores, a pesar de arremeter contra el multiculturalismo, la tolerancia, el diálogo y otras “vacas sagradas” liberales. Se ha convertido en un santón de la (pos)modernidad: un ser cuasi-divino, a fuer de radicalmente terrenal.

28/2/17

Los “Cinco Ojos” y la Red Echelon — El sistema mundial de vigilancia masiva

Siempre, permanentemente, te vigilan estos ojos inquisidores, en tu casa o en la calle, en el trabajo o en el bar, de noche y de día: no hay ninguna intimidad posible George Orwell, 1984 

Ignacio Ramonet 

Hace quince años, y en nombre de la “necesaria protección” a la población, el arsenal de medidas de control y vigilancia, que desde la Segunda Guerra Mundial no había dejado de reforzarse, explotó literalmente. Todo comienza en la primavera de 1941, en pleno conflicto mundial. Para penetrar en el secreto de la célebre máquina alemana de codificación Enigma [1], considerada inviolable, los Estados Unidos y el Reino Unido deciden sellar una alianza SIGINT [2] y cooperar en materia de información. Intercambian sus protocolos de recogida de información, comparten sus códigos, y unifican su terminología. Los analistas estadounidenses, que acababan de descifrar el código japonés PURPLE, transmiten a Londres sus técnicas y conocimientos [3]. Estadounidenses y británicos se ponen también de acuerdo sobre la forma de gestionar las informaciones recogidas y las telecomunicaciones interceptadas por todos los medios posibles (radio, radar, cable, etc.).

25/2/17

El eurocentrismo de Slavoj Žižek

 “La sociedad humana misma advierte a la periferia como el centro de acción, porque ahí existe la conectividad de las cosas, que han sido aisladas de manera sublimada por las culturas predominantes” Jaime Vargas Condori

Atawallpa Oviedo Freire

El intelectual marxista de origen esloveno Slavoj Žižek, en su artículo “Piensa Local, ¡Actúa Global!” señala lo siguiente, y que es lo medular en la fundamentación de su discurso, como asimismo para darle título a su artículo: “En los años 60, el eslogan del incipiente movimiento ecologista era ¡Piensa global, actúa local! Trump promete hacer exactamente lo contrario: Piensa local, actúa global. [1]

Cuando surgió este axioma: “piensa global, actúa local” por un grupo de ecologistas de origen europeo, fue cuestionado y rechazado por otros ecologistas e intelectuales, principalmente de Sudamérica, que veían el carácter eurocéntrico y hegemónico de aquel principio, pues el “piensa global” significaba que había un solo pensamiento en el mundo o de que todos debían llegar a pensar de una sola manera. Evidentemente, el pensamiento global o “pensamiento único” que debía ser incorporado y asimilado por resto de la humanidad, era el de los autodenominados: primer mundo, desarrollados, civilizados, europeos, occidentales; ya que todos los demás eran tercermundistas, subdesarrollados, atrasados, primitivos, inferiores. En definitiva, dicha frase representaba una clara expresión homogeneizadora, monocultural, antropocéntrica, totalitaria.

21/2/17

Goethe en Italia, sueño de juventud

Goethe ✆  Boris Pelcer
Higinio Polo

En el número 18 de la Via del Corso romana, frente al Palazzo Rondanini, se alojó Goethe durante su estancia en la ciudad, entre 1786 y 1788. Al menos, eso afirman los administradores de la casa donde vivió, aunque, en realidad, llegó a Roma el 1 de noviembre de 1786 y se marchó a Nápoles el 22 de febrero de 1787, para seguir después a Sicilia. No regresó hasta el 8 de junio de 1787, y se marchó para siempre en abril de 1788. Goethe cumplía con los rituales de su época. 

En la segunda mitad del siglo XVIII, el viaje a Italia era una de las obligaciones para cualquier persona culta: Winckelmann había puesto Pompeya y la civilización romana en el centro del interés de los nobles desocupados y los nuevos burgueses enriquecidos, y creía su deber llevar la grandeza del arte griego a todos los gabinetes de Europa. Inventando disciplinas, dotando al espolio y el robo de la dignidad del estudio y la arqueología, los contemporáneos ricos de Goethe viajaban a Italia, para entretener sus días y para educar su espíritu. “No se viaja para llegar, sino por viajar”, escribió Goethe, y esa convicción se encuentra a cada paso en sus páginas sobre Italia.

19/2/17

La globalización: más allá y más acá de Donald Trump

Sobre los múltiples consensos y el liberalismo “progresista”. China, Vietnam, la ruta de las top y los movimientos en reversa. Apple, Boeing y los tamberos norteamericanos. ¿Reformar la globalización? 

Paula Bach

La defunción del nonato Tratado Transatlántico, el retiro de Estados Unidos del TPP, la –por ahora- comedia de Trump con Peña Nieto por el muro y el NAFTA, las medidas xenófobas promulgadas –luego frenadas por la Justicia- y las acaloradas discusiones sobre el “impuesto fronterizo”, hablan por sí solos tanto de los límites de la “globalización” como de los obstáculos para cercenarla. Señalamos desde esta columna que el choque entre “éxitos” y desventuras de la globalización dibujaba el terreno más escabroso que tendría que transitar el novel presidente norteamericano. Y, efectivamente, si Wall Street recibió su asunción con una cálida bienvenida superando la barrera de los 20 mil puntos, la firma del decreto que suspendía temporalmente el programa para aceptar refugiados y limitaba el ingreso de ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, no tuvo igual acogida. Wall Street mostró su peor caída en un año. Es que Wall Street habla y en un sentido parece estarle diciendo a Trump que se cuide con el nivel arancelario para importaciones mexicanas y chinas… Discúlpesenos la digresión pero Trump también respondió decretando el inicio del proceso de revisión de la ley Dodd Frank –una regulación financiera débil implementada en 2010 por la administración Obama- y adelantó luego que anunciaría rebajas impositivas. Las bolsas volvieron a subir…Hay ahí un diálogo sintomático e imperdible.

2/2/17

El tormentoso debut de Donald Trump

Claudio Katz

Trump confirmó en sus primeros días que es un mandatario reaccionario con múltiples planes de atropellos. Mientras crece la resistencia callejera, la viabilidad de su agresión es una incógnita. Pero en cualquier caso, una acertada caracterización de su proyecto vale más que incontables vaticinios.

Una agenda virulenta

Las órdenes ejecutivas que firmó el magnate ilustran sus propósitos trogloditas. Ratificó la construcción del muro a cargo de México, puso en marcha la expulsión de indocumentados, anuló el visado para varios países árabes, anunció la quita de subsidios federales a las ciudades que protejan inmigrantes, inició la liquidación del seguro de salud (Obamacare) y congeló la contratación de empleados estatales.

Su gabinete de generales y multimillonarios incluye expertos en destruir la educación pública (Betsy DeVos), vaciar el sistema sanitario (Tom Price), liquidar el ambientalismo (Scott Prui) y congelar el salario mínimo (Andy Puzder). Su vicepresidente (Mike Spence) lidera las campañas de penalización del aborto y sus principales funcionarios son declarados anti-islamistas (Michael Flynn) o pregoneros del suprematismo blanco (Bannon).

31/1/17

La incertidumbre de las presidenciales y la “crisis orgánica” del capitalismo francés

Juan Chingo

"Es como estar delante de una película de Quentin Tarantino. Uno de esos pastiches serie B, donde cada personaje que parecía prometer un papel protagónico se encuentra "quemado" con un golpe de Magnum. Un favorito acaba de salir, bum!, él ya está en el suelo, borrado por los votantes que parecen haber convertido a esta carrera pre presidencial en una prueba eliminatoria”. De esta manera dos editorialistas de Le Monde comienzan un artículo que describe la sucesión de escenarios inéditos y la aún fuerte incertidumbre que pesan sobre las presidenciales francesas, a menos de tres meses del primer turno, sin comprender a fondo que es lo que está pasando en el volcán político en que se ha transformado la vida política francesa al fin del quinquenato de Hollande.

Y siguen: “Escándalos, la eliminación de los candidatos "salientes", debilitamiento o la división de los partidos tradicionales, tensa situación internacional... El cuadro político es inédito, a tres meses de una votación crucial. ‘La situación política nunca ha estado tan desestabilizada, se preocupa François Bayrou (político de centro derecha, N de R) que dirá solamente en febrero si se presenta a la carrera presidencial. Hace veinte años, a finales de los años Bérégovoy habían sido ya aterradores, pero si la izquierda la estaba pasando mal, la derecha republicana, estaba bien”.

29/1/17

El '1984' de Orwell parece más vivo que nunca

Pepe Gutiérrez-Álvarez

Aunque esta obra fue vendida por los ministerios de la verdad como una denuncia total del estalinismo en su apogeo y así fue presentada especialmente, en el mismo año 1984, en vísperas del derrumbe del “socialismo real”, lo cierto es que, como escribió Julio Cortázar, Orwell arremetió contra todo lo que no le gustaba de su mundo más próximo. El caso es que el tiempo ha venido a confirmar esta premisa, de ahí que la novela se haya convertido en los Estados Unidos en uno de los clásicos más vendidos, sobre todo en los últimos meses/1.

Recordemos que en los primeros tiempos de la segunda guerra mundial, Orwell veía que todavía existía la posibilidad y la necesidad de una alternativa socialista al final de la guerra, aunque sólo fuera en Inglaterra. Si bien se había comprometido en el combate, nunca dudó de que la contienda resultó una confla­gración entre lo malo y lo peor. Las componendas que siguieron a la guerra confirmaron a Orwell en la idea de que para los vencedores ninguna razón superaba a la “raison d ’Etat”, y que esto significaba lo peor. La imposi­ción del modelo soviético -para Orwell, un auténtico antimodelo- en los países del Este a la manera estalinista y, sobre todo, la nueva firma de la arrogancia norteame­ricana que había lanzado una bomba atómica sobre un pueblo “de color”, le convencieron de que el porvenir de la humanidad no podía ser más terrible.

23/1/17

México: El gasolinazo, el rumbo electoral y Trump

El alza en los precios de la gasolina tendrá implicaciones no sólo económicas, sino que impactará en la política interna e internacional, así como en la vida cotidiana
Jaime Ortega

Millones de palabras han sido escritas a partir del gasolinazo: sus causas, sus efectos, sus posibles salidas. No es para menos, quizá desde 1994 México no haya tenido un inicio de año tan convulso y conflictivo. En términos económicos la participación de Gerardo Esquivel[1] ha sido fundamental para aclarar lo que el gobierno nacional no ha podido. En tanto que en términos de la movilización social y los “saqueos” Luis Hernández Navarro[2] ha sentado algunas notas que valen la pena anotar. Aquí trataremos de establecer algunas de las principales pautas de los acontecimientos, tomando en cuenta la situación nacional e internacional, con la finalidad de salir (aunque sin restarle importancia) a la inmediatez de los acontecimientos 

21/1/17

Trump presidente: las palabras y los hechos

Atilio Boron

Este viernes Donald Trump se convertirá en el 45ª presidente de Estados Unidos. El consenso entre los analistas, salvo pocas excepciones, es que durante su gestión “veremos cosas terribles”, como asegura Immanuel Wallerstein refiriéndose al primer año de su gestión. También dice, y lo subraya con razón el especialista panameño en asuntos estadounidenses, Marco Gandásegui, que el magnate neoyorquino es un personaje “totalmente impredecible”. [1] De ningún presidente estadounidense podemos esperar nada bueno. No porque sean malvados sino porque su condición de jefes del imperio les impone ciertas decisiones que en la soledad de su escritorio probablemente no tomarían. Jimmy Carter es un ejemplo de ello; un buen hombre, como tantas veces lo recordara Fidel. Y Raúl más de una vez se encargó de decir que el bloqueo contra Cuba y la invasión de Bahía Cochinos comenzaron cuando Obama ni había nacido, y apenas contaba un año cuando se produjo la crisis de los misiles en Octubre de 1962. 

9/1/17

Ha muerto Zygmunt Bauman

Zygmunt Bauman ✆ Carlos Latuff
Con Zygmunt Bauman se apaga una de las voces más críticas con la sociedad contemporánea, individualista y despiadada, a la que definió como la “modernidad líquida”, aquella en la que ya nada es sólido. No es sólido el Estado-nación, ni la familia, ni el empleo, ni el compromiso con la comunidad. Y hoy “nuestros acuerdos son temporales, pasajeros, válidos solo hasta nuevo aviso”. Esa voz sonó lúcida hasta el fin de sus 91 años. Escribía uno, dos y hasta tres libros al año, en solitario o con otros pensadores, pronunciaba conferencias y respondía a los periodistas en entrevistas en las que había que elegir muy bien las preguntas porque las respuestas se extendían muchos minutos como en una sucesión de breves discursos. Esos sí, muy sólidos.

Ricardo Piglia, el escritor que enseñaba a leer

Ricardo Piglia ✆ René González
Juan Forn

En el tedio de las siestas de verano, todas las persianas bajas, toda la casa en silencio, un chico de tres años observa desde la penumbra a su abuelo sentado en un sillón, inmóvil, concentradísimo en el libro que sostiene en las manos. Al nieto le gusta copiar todo lo que hace el abuelo, así que arrima una silla a los estantes de la biblioteca, saca un tomazo y va a sentarse en los escalones de la puerta de su casa, con el libro abierto sobre las rodillas y la misma expresión de su abuelo. La casa queda a una cuadra de la estación de Adrogué. Cada media hora pasan por la calle los que bajan del tren. A la hora de la siesta son pocos, en ese verano de 1943. Uno de ellos, el único que repara en él, frena su marcha, le muestra sin decir palabra al chico que tiene el libro al revés y sigue su cansino camino. En 1943, la familia de Borges todavía pasaba los veranos en el Hotel Las Delicias de Adrogué. De manera que ese pasajero que le enderezó el libro al chico bien pudo ser ya sabemos quién.

8/1/17

William Shakespeare, el revolucionario

William Shakespeare ✆ Zeppo
El bardo de Inglaterra veía a todo el mundo como un completo ser humano. Esto convierte a sus obras en excelentes: y lo convierte en un gran revolucionario.
Jeremy Fox

Viendo una representación de El rey Lear en el Barbican Theatre de Londres, fui deslumbrado no por primera vez por la conciencia de pobreza y desigualdad de Shakespeare. Aunque su popularidad y pura brillantez durante su vida le mantuvieron a salvo de la Torre [1], tenía algo de revolucionario, de igualitario, mucho antes de que esa palabra o cualquiera de sus estridentes equivalentes políticos hubieran encontrado camino hacia nuestro vocabulario. Algunos pasajes, no solo de Lear sino también de otras obras, muestran pruebas de una fuerte conciencia social –en algunos momentos sin rodeos y en otros más sutilmente– a través del tratamiento y el moldeado del personaje.

3/1/17

¡Ha muerto John Berger, viva John Berger!

John Berger
A  sus 90 años, como Fidel, murió John Berger. Vivía en las afueras de París, junto a los campesinos que retrató. Escribió novelas memorables y gestó “Modos de ver”, serie y texto claves de la crítica de arte. Fue un intelectual decisivo del siglo XX, autor de novelas y ensayos clave en el panorama cultural mundial, pintor, crítico, guionista y dramaturgo. John Berger murió este lunes en Antony (París). Nacido en Londres el 5 de noviembre de 1926, Berger vinculó siempre su trabajo al compromiso político, como sucede en G., novela experimental influenciada por el marxismo y el feminismo sobre un Don Juan decadente que representa el ocaso burgués. El escritor mereció el premio Booker en 1972 por la novela, 5 mil libras que compartió con las Panteras Negras, a las que reivindicó por resistir en tierras caribeñas explotadas por la institución inglesa que otorgaba el premio: ese gesto retrata con precisión a Berger.